Cristina

Querida Núria, en nuestra casa tu voz es casi omnipresente. Mi hijo Julen descubrió tus audiolibros de Harry Potter en 2020, cuando tenía 5 años, y los escucha desde entonces, una y otra vez en un pequeño altavoz por el que se pasea por casa. Habla de Núria Rodó a sus compañeros del colegio como si todo el mundo te conociera. Tus trabajos le descubrieron el mundo de la escucha consciente y, desde entonces, además de darle vueltas a tus audios, escucha todo tipo de podcasts, algunos infantiles, pero la mayoría no.

En este tiempo, que yo le he explicado que has estado enferma, me ha preguntado por ti de forma recurrente. Y fue una enorme alegría para él ver esta web y que habías empezado a grabar de nuevo.

Hoy tiene 9 años y hace tiempo que lee los libros directamente. Dice que, en su cabeza, los lee con tu voz, pero es que se ha escuchado tus audios docenas de veces.

Te manda, como el resto de la familia (escuchantes pasivos e involuntarios, jaja) un abrazo grande y nuestros mejores deseos de recuperación.

Gracias.